martes, 28 de septiembre de 2010
Entrada 16 Erasmus. Suonmelinna y posibles viajes
lunes, 27 de septiembre de 2010
Entrada 15 Erasmus. Tallín
viernes, 24 de septiembre de 2010
Entrada 14 Erasmus. ¿¿Bajando ritmo??
miércoles, 22 de septiembre de 2010
Entrada 13 Erasmus. Planes y más planes
lunes, 20 de septiembre de 2010
Entrada 12 Erasmus. A-Dos toques United

sábado, 18 de septiembre de 2010
Entrada 11 Erasmus. Sit-sit
jueves, 16 de septiembre de 2010
Entrada 10 Erasmus. Tándem y cumpleaños
martes, 14 de septiembre de 2010
Entrada 9 Erasmus. Primera clase + Sauna
lunes, 13 de septiembre de 2010
Entrada 8 Erasmus. En manga corta por Helsinki
domingo, 12 de septiembre de 2010
Entrada 7 Erasmus. Curiosidades
sábado, 11 de septiembre de 2010
Entrada 6 Erasmus. Un poco de salmón
viernes, 10 de septiembre de 2010
Entrada 5 Erasmus. Historieta
jueves, 9 de septiembre de 2010
Entrada 4 erasmus. Paz interior
Entrada 3 Erasmus. Primera semana e impresiones
miércoles, 1 de septiembre de 2010
Entrada 2 Erasmus. Aeropuerto de Helsinki
Volví a starbucks, hice la pregunta y la contestación fue: yes, but only with notes. Mi cara de poker debió ser delatadora y la chica aclaró: papers, bills.. a lo que ya pude contestar, okey, okey. A mala hora.. porque pedí el white caffé mocca, que el más pequeño valía 6 € y la tia va y me devuelve en coronas!! Pues nada, ya tenia 4 euros en coronas para gastar antes de irme.
El euro sobrante, que son 6 coronas danesas me lo he quedado de recuerdo… que remedio, nada vale un euro en un aeropuerto, y menos de los países nórdicos. Lo mínimo son 10 coronas.
Último vuelo del día: Copenaghe – Helsinki. Cansado, bastante cansado. Nervios de Nuevo. Otra vez despegar y luego aterrizar.
Durante el vuelo, lectura del librito de conversación en inglés (se acercaba el momento, esas cosas se notan), un poco de ipod y una cabezadita. Todo es necesario. A falta de 30 minutos para llegar siento muchisimas ganas de que acabe ya, de llegar y no deja de venirme a la cabeza la maleta, que a saber donde andaba.
Llegada a Helsinki a la hora prevista, una hora menos en España. Me sorprende de manera inusitada encontrar mi maleta en la cinta transportadora viniendo hacia mi. Por fin estoy en tierra firme y con maletas. Casi increíble.
Siento una satisfacción inmensa, algo indescriptible.
Salgo y veo a Andrés, que me estaba esperando como habíamos acordado… Es como un gran respiro de aire fresco tras un día tan agotador.
La noche aquí, en el aeropuerto va transcurriendo mas o menos rápido. Con Internet gratuito y tal, que es todo un lujo, la cosa va bien. Andrés ahora mismo duerme, y yo cuido las maletas y mientras os pongo al día a ritmo de redbull y con the sunday drivers a los cascos. (aunque se hayan separado, siempre estarán ahí)
Queda poco tiempo para comenzar un día que marcará el antes y el después. Estoy con ganas, es la actitud. Por ahora todo funciona a la perfección.
Me despido, con ilusión y felicidad, mucha felicidad. Una vez mas, gracias por todo a mis padres porque sin ellos, nada de esto. ¡Os quiero mogollón!
Entrada 1 Erasmus. Aeropuerto de Copenhague.
19.50H he llegado a Copenhague. Lo primero que debo decir es que estoy bien, muy bien. Esto ya empieza a ser como me lo había imaginado y eso es bueno.
Por lo pronto, el aeropuerto de Copenhague es como un centro comercial inmenso. Desde que he bajado del avión, hasta que me he sentado en un sitio, habré andado cerca del medio kilómetro, todo lleno de tiendas de todo, de ropa de comida, restaurantes, lounges, starbucks, etc. Y he de reconocer que desde la salida del avión a la entrada en el macro-aeropuerto de Copenhague olía a pescado y no me daba buenas vibraciones. Ahora ya todo ha cambiado.
Un detalle importante a tener en cuenta es que aquí, en Dinamarca, funcionan con coronas danesas, jajaja, y claro.. yo no tengo más que euros. Me ronda la típica pregunta en la cabeza en plan.. Can I pay you in euros? Pero voy a esperar una horita mas machacándola bien, no vaya a ser que me contesten y tenga que emplear mi espectacular lenguaje de gestos, o también la posibilidad de tener la frase comodín de… okey, thank you, I’ll come back later. Gran frase eh! Pero puedo aguantar por ahora, mientras tenga cosas que hacer, como escribir esto.
Os contaré mis dos apasionantes vuelos:
Valencia – Zürich:
Lo primero de todo, ha sido el numerito de pasar el equipaje de mano y tal, que con el portátil en la maleta, tenia que sacarlo, y no solo eso, tenia que pasarlo en una bandeja por separado a la de las demás pertenencias que te sueles quitar, como lo que llevas en la mano, el móvil, el cinturón, etc. Pues he pasado 3 veces por el detector, y todo esto contando con que jugaba en casa. Lo peor de todo es que después de pasar dos veces por el detector sin pitarme nada, paso la tercera y me pita, jaja y el policía se habrá deleitado tocándome las partes más intimas. Muy fuerte todo. Bueno, entro ya, y a buscar la puerta B8, muy cerca, muy bien. Todo fluye.
Subo al avión, bienvenida en francés (dirección Zurich) y yo.. buenas! J. Casi la lío con la maleta, pero al final consigo dejar todo lo que llevaba en la mano en el asiento y puedo meterla en el portaequipajes. Todo un logro. Me siento, asiento de pasillo, pasa un rato y vienen con un bocadillito en plan guay y bebidas. Ojo a la primera en la frente porque le digo al hombre que las repartía: coke for me please, y el tío me pode zumo de manzana… y claro, no le he dicho nada por no armar un escándalo. Yo creo que lo ha hecho a propósito, lo tengo claro, se me nota en la cara que voy de novatillo. En fin.. me lo acabo todo, zumo de manzana incluido y reparten unas chocolatinas, que como no me gusta el chocolate guardo muy discretamente entre la servilleta que antes también me habían dado para llevármela a Helsinki y lo dejo encima de la bandeja. Ahora pasa una azafata con un carrito en plan basura y empieza a quitar los plásticos de los bocadillos , vasos y, ojo a la segunda, coge sin decirme nada la servilleta donde estaba la chocolatina y la tira al tiempo que le voy diciendo: no, no no… se gira, me mira y no entiendo muy bien lo que dice, porque es en un francés cerrado. Le digo, como si yo supiera hablar perfectamente: do you speak english? Y recibo una contestación muy clara: Je ne parle pas. Genial!! Esto viene así. El resto del vuelo, leo Esquire.
Llego a Zürich, justísimo de tiempo, embarco ya directamente en el siguiente avión, porque llevaba 10min de retraso. Suiza mola, mucho verde, casas bonitas, aire puro, ¡mola!
Zürich – Copenhage:
Embarco, Welcome sir, la cosa cambia. El avión lleno de Daneses altísimos y yo ya todo un experto, busco mi sitio. Esta vez ventanilla. Subo la maleta y pido permiso con un simple gesto y un please. El hombre muy amable, sure, yo: thank you sir (me había quedado con la copla), él, you’re welcome. Esto ha sido una conversación en toda regla!!
Leo Esquire en mi sitio, donde veo Suiza al despegar y vuelven con un bocadillito como el anterior y las bebidas. Esta vez me lo dan y pido de nuevo coke. Ahora si que si! Jeje. Vienen con la chocolatina, mientras estaba leyendo otra vez y la rechazo con un: No, thanks. Todo en orden, al fin y al cabo la chocolatina no era tan importante.
Sigo leyendo y con media revista ya, llega el vuelo a Copenhague…
Volveré con novedades. Voy a ver si me animo con el starbucks.